sábado, 10 de septiembre de 2011

Capítulo 15.. la imaginación y el pensamiento no se encierran ni se encadenan

... miles de cadenas atan tu vida. Cuando eres un niño los límites los ponen tus padres, la hora de llegada, que ropa ponerte, cuales son las mejores compañias... De repente te vuelves un adolescente y entonces es cuando las cadenas te las pone la sociedad, ama a quien todos digan, viste como la mayoría, ¿qué todos creen en dios? pues tú también.. ¿qué mañana no se cree en nada? pues tú tampoco crees en nada... Al poco te miras al espejo y eres todo un adulto "independiente" y "libre".. Vale.. se acabo dar explicaciones a tus padres, crees tener tus propias ideas y eres fiel a ellas, pero tus cadenas te las pones tu mismo, te atas a una hipoteca, el trabajo que tu escogiste decide por ti cuando disfrutar de tu vida social, el dinero se vuelve el centro de tu vida. Dicen que "el dinero no da la felicidad" pero si afloja cadenas. A pesar de todo hay algo que siempre será así... "la imaginación y el pensamiento no se encierran ni se encadenan" Disfrutemos de la intimidad de nuestra mente
(por cristian)

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